martes, 13 de noviembre de 2007

Para bien o para mal...

De nuevo hemos sido metidos en el bombo de la lotería y nos han revuelto un poco. Otro año más para adaptarnos a los nuevos compañeros que no conocemos. Ahora tal vez menos preocupados que el año pasado. Es como cambiar de casa, volver a averiguar cual es el lugar de las cosas, abrir los armarios y ver qué se esconde detrás de cada uno. Lo cierto es que imagino que a la mayoría nos da rabia el despegarnos de gente con la que hemos compartido tanto tiempo. Al fin y al cabo, pasamos gran parte de nuestro día al lado de compañeros, qué menos que intentar sentirnos un poco bien en la medida de lo posible, ¿a caso no nos merecemos eso?.
El caso es que ahora nos toca empezar otra vez. Hay quien ha tenido mejor suerte y repite en gran parte con varios de este año, y hay quien no la ha tenido, para bien... o para mal. Eso ya se verá.

Por otra parte, parece que vamos a ser un poco más normales, con horarios más normales, COMO LA GENTE DE FUERA, que trabaja con sus turnos de ocho horas (sin olvidar las horas de bolsa) y se va a su casa... ¡con la posibilidad de comer en la propia casa cuando vayamos en turno de mañanas!. Sinceramente, confiaba en que esto pudieramos verlo algún día en un futuro no muy lejano.
Ahora estamos a la espera de los "deseados" calendarios. Ver cómo son las rotaciones, las noches, los horarios en los sábados. Saber si libramos el día de nuestro cumpleaños... si guardaremos fiesta el día del trabajador como la mayoría de los mortales... Esas curiosidades estúpidas que luego nos desilusionan, pero que de momento nos mantienen en vilo.

Siempre teniendo presente que... la curiosidad, que mató al gato.
Gracias a los que han hecho factible este mejorado horario cuidando sus facturaciones.

Un saludo.