jueves, 20 de marzo de 2008

Repretar o no repretar...

Parece que en estos últimos tiempos estamos generando una cantidad superior de bultos para enviar a las tiendas en proporción al que se enviaba antes. De manera que supone más camiones, y por ende más dinero.
Esto tal vez está derivado de algunas cuestiones a tener en cuenta.

1. El volumen de los artículos. El hecho de colocar camisetas prácticamente planas es mucho más sencillo y otorga más posibilidades que los lotazos de sudaderas o los surtidos.

2. El hecho de seguir "evitando mermas", es decir, precintando las cajas en las tolvas. Esto hace que se envíe la caja antes de que esté completamente llena, dado que precintar una caja a rebosar es más complicado.

3. Los suritidillos. Cuando una caja está casi llena el tolvero duda entre mandarla o no mandarla. Al final en numerosas ocasiones decide mandarla porque, de caer un surtido va a ser completamente imposible cerrarla.

4. El "repretamiento". Esta técnica ha caido ya en desuso. Antes se colocaba la ropa en los laterales de la caja, si bien adquiría cierta forma esférica, permitía que en su interior cupiesen más prendas por caja. Se empujaba la ropa hacia el fondo haciendo perder parte del volumen de la prenda y aire contenido en el plástico, y ahora, en lugar de acomodarla, permitimos que viaje cómoda.

5. El número de tolvas. Está claro que a mayor número de tolvas menos posibilidades de que la ropa vaya bien colocada. Supongo que es de ahí de donde ha partido la idea de las "pruebas de densidad" para ver si una sola persona con cinco tolvas puede reducir el número de bultos generados. Y tal vez sea así, lo único objetivo es que con un número que oscila entre 20 y 40 tolvas no pueden esperar milagros...


Tal vez, cuando antes sobresalían prendas del nivel de la caja (y no se precintaba) se esperaba que la precintadora la comprimiera -a modo de prensa- y ahora se manda con cierta holgura para que no dé problemas.
Antes, se avisaba de la familia de prendas que se iba a tirar y se colocaba caja en función de la misma; es decir, cuando se iban a tirar camisas se ponía caja pequeña, porque esto permitía colocarlas mejor, y por tanto reducir el volumen de bultos. Asimismo, el punto determinaba caja grande para evitar que se desparramaran por ahí las prendas de esta clase. Me pregunto si sería posible clasificar los surtidos en una nueva familia y tratarlos de un modo especial como al punto.
Creo que un numero superior a 15 o 20 tolvas por inditexito es caer en el subrealismo. Todos sabemos que tenemos dos manos y dos pies.
Cuando has apagado la luz de una tolva casi llena, dado que has colocado sus prendas, levantas la cabeza y ves otras cinco luces brillando, la más cercana a doce metros, te hace plantearte si enviar o no esa caja casi llena por no tener que volver en cuanto caiga otra prenda.
Me temo que el hecho de llevar la precintadora, ir a por precinto cuando se te acaba, el mero hecho de precintarla... hace perder bastante tiempo, que no es invertido en colocar.

Y sí, todos estamos de acuerdo en que la ropa debe ir más o menos colocada... pero quizá deberían plantearse por qué no ocurre así.
Repretar o no repretar... he ahí la cuestión.

Un saludo.